Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas,
guardé silencio,
porque yo no era comunista.
Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata.
Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté,
porque yo no era sindicalista.
Cuando vinieron a llevarse a los judíos,
no protesté,
porque yo no era judío.
Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar.
— Martin Niemöller
Estamos viviendo tiempos revueltos en los que no solemos mirar más allá de nuestro ombligo. Por eso el poema que os transcribo me hizo reflexionar y lo he querido compartir con vosotros. Es un poema, ‘Guardé silencio‘, de Martin Niemöller (1892-1984), pastor luterano alemán.
A pesar de su apoyo inicial a Hitler, a partir de 1933 fue crítico con el nazismo y constituyó un movimiento de resistencia denominado Iglesia Confesional. Fue arrestado por la Gestapo en 1937 y declarado culpable de traición, siendo confinado hasta el final de la guerra en los campos de concentración de Sachsenhausen y Dachau. Después de la guerra, pronunció innumerables conferencias, concluyéndolas a menudo con el presente poema.
Tal y como dijo un personaje de la película Paterson de Jim Jarmusch: “la poesía traducida es como… tomar una ducha con impermeable”, por eso os dejo las dos versiones.
Hoy más que nunca hace falta leerlo y reflexionar. Aquí tenéis la versión original:
Als die Nazis die Kommunisten holten,
habe ich geschwiegen;
ich war ja kein Kommunist.
Als sie die Sozialdemokraten einsperrten,
habe ich geschwiegen;
ich war ja kein Sozialdemokrat.
Als sie die Gewerkschafter holten,
habe ich nicht protestiert;
ich war ja kein Gewerkschafter.
Als sie die Juden holten,
habe ich nicht protestiert;
ich war ja kein Jude.
Als sie mich holten,
gab es keinen mehr, der protestieren konnte.
Leed esta interesante entrada sobre las confusiones sobre la autoría de este poema.
Entrada publicada en Poémame
#RegEye @jlregojo